El sistema de instalación está compuesto simplemente por dos piezas de plástico: un distanciador y un conector, que garantizan una gran facilidad de uso.
El conector puede “fijarse” en el distanciador y, con este procedimiento, es posible llegar a crear una rejilla de plástico. Los bloques de vidrios deben simplemente colocarse dentro de las aberturas durante el proceso de instalación.